martes, 27 de marzo de 2012

Nabucodonosor

                                      William Blake (1757-1827), "Nebukadnezar" (1795) 

 "Nabucodonosor rey,a todos los pueblos,naciones y lenguas que moran en toda la tierra:Paz os sea multiplicada.Conviene que yo declare las señales y milagros que el Dios Altísimo ha hecho conmigo.!Cuán grandes son sus señales, y cuán potentes sus maravillas! Su reino, reino sempiterno, y su señorío de generación en generación.
Yo Nabucodonosor estaba tranquilo en mi casa, y floreciente en mi palacio.
Vi un sueño que me espantó, y tendido en cama, las imaginaciones y visiones de mi cabeza me turbaron.Por esto mandé que vinieran delante de mí todos los sabios de Babilonia, para que me mostrasen la interpretación del sueño.
Y vinieron magos, astrólogos, caldeos y adivinos, y les dije el sueño, pero no me pudieron mostrar su interpretación,hasta que entró delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi dios, y en quien mora el espíritu de los dioses santos. Conté delante de él el sueño, diciendo:Beltsasar, jefe de los magos, ya que he entendido que hay en ti espíritu de los dioses santos, y que ningún misterio se te esconde, declárame las visiones de mi sueño que he visto, y su interpretación.
Estas fueron las visiones de mi cabeza mientras estaba en mi cama: Me parecía ver en medio de la tierra un árbol, cuya altura era grande.
Crecía este árbol, y se hacía fuerte, y su copa llegaba hasta el cielo, y se le alcanzaba a ver desde todos los confines de la tierra.Su follaje era hermoso y su fruto abundante, y había en él alimento para todos. Debajo de él se ponían a la sombra las bestias del campo, y en sus ramas hacían morada las aves del cielo, y se mantenía de él toda carne.Vi en las visiones de mi cabeza mientras estaba en mi cama, que he aquí un vigilante y santo descendía del cielo.
Y clamaba fuertemente y decía así: Derribad el árbol, y cortad sus ramas, quitadle el follaje, y dispersad su fruto; váyanse las bestias que están debajo de él, y las aves de sus ramas.Mas la cepa de sus raíces dejaréis en la tierra, con atadura de hierro y de bronce entre la hierba del campo; sea mojado con el rocío del cielo, y con las bestias sea su parte entre la hierba de la tierra.
Su corazón de hombre sea cambiado, y le sea dado corazón de bestia, y pasen sobre él siete tiempos.
La sentencia es por decreto de los vigilantes, y por dicho de los santos la resolución, para que conozcan los vivientes que el Altísimo gobierna el reino de los hombres, y que a quien él quiere lo da, y constituye sobre él al más bajo de los hombres.
Yo el rey Nabucodonosor he visto este sueño. Tú, pues, Beltsasar, dirás la interpretación de él, porque todos los sabios de mi reino no han podido mostrarme su interpretación; mas tú puedes, porque mora en ti el espíritu de los dioses santos.Entonces Daniel, cuyo nombre era Beltsasar, quedó atónito casi una hora, y sus pensamientos lo turbaban. El rey habló y dijo: Beltsasar, no te turben ni el sueño ni su interpretación. Beltsasar respondió y dijo: Señor mío, el sueño sea para tus enemigos, y su interpretación para los que mal te quieren.

Artemisia Gentileschi(1593–1653)-Judith Beheading Holofernes, Oil on canvas,199 × 162 cm

 "O rei de Babilonia Nabucodonosor enviou a Holofernes a vingar-se das nações do oeste que tinham evitado ajudar a seu reino. O general pôs lugar a Betulia e a cidade quase rende-se. Foi salvada por Judith, uma bela viúva judia que se introduziu no acampamento de assédio de Holofernes, compartilhou banquete com ele e o embriagou
Judith o decapitou enquanto dormia.Segundo relata a Biblia,ela regressou a Betulia com a cabeça do decapitado e os judeus venceram ao inimigo."


El árbol que viste, que crecía y se hacía fuerte, y cuya copa llegaba hasta el cielo, y que se veía desde todos los confines de la tierra,cuyo follaje era hermoso, y su fruto abundante, y en que había alimento para todos, debajo del cual moraban las bestias del campo, y en cuyas ramas anidaban las aves del cielo, tú mismo eres, oh rey, que creciste y te hiciste fuerte, pues creció tu grandeza y ha llegado hasta el cielo, y tu dominio hasta los confines de la tierra.
Y en cuanto a lo que vio el rey, un vigilante y santo que descendía del cielo y decía: Cortad el árbol y destruidlo; mas la cepa de sus raíces dejaréis en la tierra, con atadura de hierro y de bronce en la hierba del campo; y sea mojado con el rocío del cielo, y con las bestias del campo sea su parte, hasta que pasen sobre él siete tiempos;esta es la interpretación, oh rey, y la sentencia del Altísimo, que ha venido sobre mi señor el rey:que te echarán de entre los hombres, y con las bestias del campo será tu morada, y con hierba del campo te apacentarán como a los bueyes, y con el rocío del cielo serás bañado; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que conozcas que el Altísimo tiene dominio en el reino de los hombres, y que lo da a quien él quiere.
Y en cuanto a la orden de dejar en la tierra la cepa de las raíces del mismo árbol, significa que tu reino te quedará firme, luego que reconozcas que el cielo gobierna.Por tanto, oh rey, acepta mi consejo: tus pecados redime con justicia, y tus iniquidades haciendo misericordias para con los oprimidos, pues tal vez será eso una prolongación de tu tranquilidad.Todo esto vino sobre el rey Nabucodonosor.
Al cabo de doce meses, paseando en el palacio real de Babilonia,habló el rey y dijo: ¿No es ésta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad?
Aún estaba la palabra en la boca del rey, cuando vino una voz del cielo: A ti se te dice, rey Nabucodonosor: El reino ha sido quitado de ti;y de entre los hombres te arrojarán, y con las bestias del campo será tu habitación, y como a los bueyes te apacentarán; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que reconozcas que el Altísimo tiene el dominio en el reino de los hombres, y lo da a quien él quiere.
En la misma hora se cumplió la palabra sobre Nabucodonosor, y fue echado de entre los hombres; y comía hierba como los bueyes, y su cuerpo se mojaba con el rocío del cielo, hasta que su pelo creció como plumas de águila, y sus uñas como las de las aves.
Mas al fin del tiempo yo Nabucodonosor alcé mis ojos al cielo, y mi razón me fue devuelta; y bendije al Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su reino por todas las edades.Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada; y él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces?
En el mismo tiempo mi razón me fue devuelta, y la majestad de mi reino, mi dignidad y mi grandeza volvieron a mí, y mis gobernadores y mis consejeros me buscaron; y fui restablecido en mi reino, y mayor grandeza me fue añadida.
Ahora yo Nabucodonosor alabo, engrandezco y glorifico al Rey del cielo, porque todas sus obras son verdaderas, y sus caminos justos; y él puede humillar a los que andan con soberbia."

La Biblia
El libro de Daniel Capítulo 4
La locura de Nabucodonosor


                                           Self-portrait as the Allegory of Painting (Self-portrait as La Pittura). Oil on canvas, 965 x 737 mm (39 x 29"). Inscribed: A.G.F. [Artemisia Gentileschi fecit]. Lent by Queen Elizabeth II.

De la Asiria monarca omnipotente,          
Creyó del mundo antiguo ser el dueño,      
Y por lograr su temerario empeño,          
«¡No soy Rey, que soy Dios!», gritó demente.
    «¡Oh polvo que animé!-dijo doliente    
El gran Jehová, mirándole con ceño-.      
Pues más que humano te juzgaste en sueño,  
Menos que humano te hallará la gente.»    
    El regio manto que en sus hombros pesa  
Cayó, dejando ver la piel oscura,          
Donde el áspero vello hizo su presa;      
    Inclinó la cerviz con amargura,        
Y mordiendo, al pasar, la hierba espesa,  
Bramando se alejó por la llanura. 
  
_Nabucodonosor-Manuel del Palacio y Simó (Lleida, 1831- Madrid,1906).




Va, Pensiero, sull’ali, dorate;
Va, ti posa sui clivi,
Sui colli,
Ove olezzano tepide e molli
L’aure dolci del suolo natal!
Di sione le torr atterrate...
Oh, mia patria se bella e perduta!
Arpa d’or dei fatidici vati,
Perché muta dal salice pendi?
Le memorie nel petto raccendi,
Ci favella del tempo che fu!
O simile di solima ai fati
Traggi un suono
Di crudo lamento,
O t’ispiri il signore un concento
Che ne infonda al patire virtú!
Che ne infonda al patire virtú,
Che ne infonda al patire virtú,
Al patire virtú
Va Pensiero - Nabuco




 "Giuseppe Fortunino Francesco Verdi (La Roncole,  Busseto, 10 de octubre de 1813 – Milán, 27 de enero de 1901) Seu enterro suscitou grande conmoción popular e ao passo do cortejo fúnebre o público entoou espontaneamente o coro dos escravos de Nabucco ("Vai pensiero sull'ali dorate")."


Coro do Metropolitan Ópera House de Nova York,interpreta Vai Pensiero da ópera Nabucco de Verdi, em 2002.com letra de Temistocle Solera, inspirada no Salmo 137 Super flumina Babylonis.Canta a história do exílio hebreu em Babilonia depois da perda do Primeiro Templo de Jerusalém.



 "Montado en la diligencia
me voy camino de Francia
¡Me cago en la Providencia
del Juez de Primera Instancia
del Distrito de la Audiencia!"


Manuel del Palacio y Simó: Al Marqués de Aldama


                                                                   Verdi's Funeral
 
 
¡Vuela, pensamiento, con alas doradas;
Vuela y pósate en los cerros,
En las colinas
Donde exhalan su olor suave y tibio
Los dulces aires del suelo nata!
Saluda las riberas del Jordán,
Las torres derruidas de Sión...
¡Oh, patria mía, tan hermosa y perdida!
¡Oh, recuerdo amado fatal!
Arpa de oro de los vates fatídicos,
¡Por qué pendes, muda, del sauce?
¡Reanima los recuerdos en tu seno
Y hablamos del tiempo que pasó!
¡Que el destino de Jerusalén
Te inspire los acentos
De una triste lamentación
O que el Señor te inspire un canto
Que nos dé fuerza al partir!
Que nos dé fuerza al partir,
Que nos dé fuerza al partir,
Fuerza al partir!
 

Va Pensiero - Nabuco