jueves, 5 de septiembre de 2013

FANTASIA DE CORTE Y NOBLEZA,; ATO II CENA I




( Están en el Castillo del rey de Fontipanerika, en la lavandería, el propio rey y Olmo,planchador de camiasa del rey de Fontipanerika)

 

 
CAUSTO LÍGITO: ¡Hola!, Olmo, ¿qué tal van las cosas por aquí?. Supongo que uno se acostumbra a este calor...

 

OLMO: Supongo que peores abrasiones son las producidas por el amor, su majestad

 

CAUSTO LÍGITO: Vaya, como es la vida, unas y unos suponen una cosa y otras y otros suponen otras y se crean falsas ilusiones... ¿acaso es eso lo que piensas?, de todas maneras es curiosa de por sí ya la situación, pues has tocado la cuerda idónea del monocordio

 

OLMO: ¿Qué?

 

CAUSTO LÍGITO: Sí, hombre..., ¡Claudio Ptolomeo!.Verás. Ahora me estoy iniciando en la música. Es esta una expresión de mi invención que bien puede valer para estas épocas en que nos tocó vivir, pues refiérese tal dicho de mi activo campo imaginativo al hecho que se presenta algunas veces cuando alguien debido a su ocurrencia y lógica deductiva convive por el efecto con la justa medida de las cosas

 

OLMO: Bien, creo entender, es como si acertase con lo que tú también querías decir.

 

CAUSTO LÍGITO: Correcto!, igual que la música acierta con el sitio donde se esconden nuestras propias raíces.

 

OLMO: Será así entonces!. Yo escucho cuando la primavera llega atentamente, esperando que los pájaros vuelvan, y entre ida y partida escribo poemas de amor.

 

 

CAUSTO LÍGITO: Si al hablar del amor miras a una estrella y nada te dice puede ser que no ames o que la estrella no sabe lo que es el amor, pero en tu caso...,¡bien!...¡no sé yo!; ¿que te dice a ti una estrella?

 

 

OLMO: Que yo a ella no le miro sino que me mira ella, y por eso tuerzo la vista y alzo la mirada buscando su perfil.

 

CAUSTO LÍGITO:. ¿Cuántos años llevas aquí?

 

OLMO: Diez y seis años

 

CAUSTO LÍGITO:¿Cuántos años tienes?

 

OLMO: Treinta y uno

 

CAUSTO LÍGITO: Dos menos que yo. Como bien sabes yo soy amigo de las letras también, y en realidad del arte en general. Estuviste a las ordenes de mi padre. Eran otros tiempos. Estamos ante la caída de este gran imperio desde  hace ya dos o tres generaciones. Mientras, tu trabajas para mantener en nuestra imagen la distinción que se debe en los tiempos que corren a quienes llevamos las riendas de este juego, pues eres planchador de camisas, pero a la vez también  haces poemas, y yo soy un rey y hago poemas también. Como puedes ver, y aunque ya lo supieres debes pensar que hay algo que nos une y que no tiene los pies en la tierra. Estas alianzas convienen cuanto menos para sentirse comprendido por la labor ejercida. Algún día habrá muchas y muchos planchadores de camisas y se unirán para luchar por sus derechos, al igual que habrá muchas y muchos artistas e igual de lo mismo, aunque es de esperar que estas y estos últimos cuanto menos sean más divertidas y divertidos.Pero tu caso reune la condición de ser las dos circunstancias en la misma cosa.  

 

 

OLMO:  Cierto es decir que con su excelencia se vive mejor que cuando su padre..., cierto es decirlo...,¡bien!...,perdone mi atrevimiento...

 

CAUSTO LÍGITO: No te preocupes, lo entiendo perfectamente. Yo permanecí bajo su sombra emboscado hasta que él murió. Pero me doy perfecta cuenta de que desde luego no era precisamente de los reyes más justos. Vaya!...,estas planchas que tienen orificios candentes son bien curiosas...

 

OLMO: Como dice usted antes eran otros tiempos. Yo le estaré siempre agradecido a su majestad por haberme enseñado a escribir.Siempre fue algo reconocido por hombres y mujeres de alta alcurnia y aun entre gentes de la baja nobleza y desde que las personas nos vestimos, el hecho de hacer destacar la diferencia y superioridad sobre las y los de inferior rango con las formas más curiosas, de tal forma que es cuestión sublime no ofrecer ninguna señal rugosa en la ropa, eso da sensación de poder...

 

CAUSTO LÍGITO: Sí, pero hay otro hecho que condiciona tal certeza. A las personas para tales distinciones les gustan también los pliegues...

 

OLMO: Creo entender, o sea que...

 

CAUSTO LÍGITO: Que se brinda por la eficacia de lo llano pero luego se hacen las condecoraciones según el conjunto de plisados que dan el aspecto rugoso primigenio despreciado.

 

OLMO: Lo que es de agradecer es que su excelencia se digne a hablar con sus servidoras y servidores

 

CAUSTO LÍGITO: (Toca la plancha) Vaya!...,estas planchas que tienen orificios candentes son bien curiosas. Sana costumbre es la del diálogo y hacia este se debe caminar para que una nación prospere.

 

OLMO: Nada se puede si no es con la fuerza del amor y no la de la ira y confusión que traen consigo el ser prejuicioso en esta vida por culpa de la ignorancia.

 

 

CAUSTO LÍGITO: Amar, como tu amas...,!  pero,...necesito...

 

 

(Suena el cetro del rey contra el suelo cuatro veces intermitentemente)

 

 

CAUSTO LÍGITO: ...se dice que ahora escribes dichos poemas de amor y los lanzas por los vano del castillo como si fuesen palomas que pareciere que se desvanecen para posteriormente girar sobre su eje y posarse en el suelo....Pero...; ¿porqué tarda tanto este mi paje?. Esta vara siempre la escuchan las y los siervos...; ¿que habrá pasado?

 

OLMO: Bueno, es una forma como otra cualquiera...

 

CAUSTO LÍGITO: (Abriendo la puerta y a voz alzada) : Pero...,¿donde vas en tal veloz carrera por el corredor, lindo paje?. ¿Se puede saber donde demonios andabas metido?

 

(Entra Paje 1º)

 

POPULO: Disculpe su majestad, haciendo las necesidades vitales...

 

CAUSTO LÍGITO: ¿Cuáles?. Bueno, es igual..., no..., me interesa...viniendo de ti ya sé de cual necesidades. Necesidades a las que este rey que dejará de ser rey  para liberar al pueblo también está obligado. ¡Quiero un tazón de agua fresca!

 

PAJE 1: ¡Ahora mismo!; ¡sus deseos serán cumplidos, su majestad!

 

CAUSTO LÍGITO: ¡Mis deseos no!...,lindo paje...mis necesidades...¡en fin!, ¡apresúrate!, pero no corras...¡Bien!, por donde ibamos....

 
 

(Sale Paje 1º)


 

OLMO: Usted decía su excelencia, y yo así le reconocía el hecho de que últimamente lanzo poemas por los vanos abiertos...

 

 

CAUSTO LÍGITO: (Grita): ¡Incluso desde las aspilleras te han visto!...

 

OLMO: ¡Su majestad!...,permítame...

 

CAUSTO LÍGITO: (Grita otra vez, luego se calma) : ¡bien!...¡debo calmarme...!,debo ser un rey justo...Se sugiere de que esas letras tienen una remitente; que van dirigidas sus tonalidades y pasiones interiores y desvelos hacia la persona de mi sobrina.

 

OLMO: Perdone...,pero eso no es cierto...

 

CAUSTO LÍGITO: ¡En tu forma de mirarla te delatas!

 

OLMO: ¡Eso no son más que calumnias!

 

CAUSTO LÍGITO: ¡O sea!...,dices ahora que Youlovina no es digna de ser mirada entonces con los ojos del amor que dices tú llevar dentro, que no merece ella ser reclamo de tus pasiones...;¡vaya!...,creo que te he cogido en un juego de difícil salida.¿Para quien es entonces ese amor dirigido encerrado tu en este castillo?

 

OLMO: No entiendo...,pero...,es...un amor...universal.

 

CAUSTO LÍGITO: (Desdoblando un papel) ¡Universal!...,¡ya!, claro...¡ya veo!...A ver...este...¡de tu puño y letra!...cogido al vuelo por Conciliabilis; él fue quien me puso a mi sobre aviso de estas circunstancias tan osadas y pretenciosas las tuyas.

 

“¡Me pasaré por ahí!.

 
Pues mejor sería para mi

 
Verte de cerca a ti;

 

                       ¡ Será una cosa buena!.

 

 

 

Mañana voy a mendigar.

 
Y a la primera señal de claridad

 
Te enseñaré a beber el néctar de las flores....”
 
 

Y no sigo leyendo pues presenta un carácter tendente a lo obsceno, para mi gusto. En fin, que con todo este entuerto me has demostrado no ser sincero, por lo que espero que dejes de insinuarte a mi sobrina. No das la talla para ello. No prohibiré que escribas, pero que no sean hipócritas palabras...

 

OLMO: Con el debido respeto, su majestad, pero creo que está usted enredando todo esto de una manera innecesaria. Ya le dije lo que tenía que decirle.Y yo de usted,ya que su excelencia permite comentar a quien vigilaría es a ese embajador de la paz y guerra...
 
 

 

CAUSTO LÍGITO:¿Vigilarle?,yo no te vigilé a ti.Es más,fuiste educado por mi oficio en el arte de la escritura.Yo lo que repudio es el hecho de no ser sincero más que lass eventualidades de las estrategias,y tu has demostrado no serlo.

 

CAUSTO LÍGITO: Y yo también a ti

 

OLMO: Es injusto conmigo. La obra de un artista no se debería medir con ese rigor. ¡Pues bien!..., así yo le digo pues que su sobrina es digna de amor, respeto admiración y lleva en sus ojos lo que el viento se debió de dejar olvidado en una pequeña isla del deseo, dos luceros vivos en señal de amor, una piel suave como estas camisas cuando están recién planchadas...

 

CAUSTO LÍGITO: Alto!. Pero, ¿en donde está la simetría y la coherencia en vuestra dicción intimista? . ¡Te he cogido!, se coge antes a un mentiroso que a alguien que está dormido y bien dormido. ¿Cómo puedes pensar que así alguien pueda quererte? ,diciendo que sí y luego que no. ¡No quiero que te acerques a mi sobrina!.La pobre ya ha sufrido penalidades en su vida como la de haber perdido a su madre cuando esta le vió nacer. Más que protegerla yo a ella es ella la que a mi protege...

 

 (Tres puñetazos en la puerta.Entra Paje 2º)

 

 
PAJE 2º: “ Su Majestad. Acaba de llegar un mensaje urgente.

 

CAUSTO LÍGITO: ¿ Cómo?, dámelo y retírate. Así pues, ya sabes Olmo..ya sabes...

 

(Sale el rey. Está solo. Lee el mensaje)

 

 

CAUSTO LÍGITO: “ Su Majestad. Han surgido contratiempos de última hora. Las hordas del Norte están presentando batalla y no responden a las razones del diálogo.Quienes aquí habitan son descendientes de esas tribus bárbaras que tantas dificultades pusieran a otros imperios.No existe ninguna forma de diálogo.Armados pero en misión de paz estamos siendo acosados en emboscadas que se disponen tristemente en nuestro camino...”. No necesito leer más.¡Bien!, justo lo que pensaba, este Castoriux es un traidor.Me llevará hasta Escarpín.Cree que puede esconder su juego el conde de Panerikafonti, pero lo desenmascararé.

 

 

                                                   FIM